viernes, 18 de enero de 2013

¡¡FE!!


Nada perturba el silencio.
Exilio oportuno, íntimo.
Refugiada dentro de mi jaula, sin más sustento que mis vísceras moribundas.
Ávida, ansiosa…
Ante mí, como letanías, despliego los versículos de mí fe.
Concentrada en ellos, preparo la mente.
Cuerpo hambriento de oraciones y dogmas.
Sediento de credos esperamos el momento…
Como siempre, sin prisa, sin pausa.
Examino el trabajo, minucioso, reverente, casi etéreo. 
Preparas el altar con el silencio de tu deseo.
Detalles insinuantes en el baile de tu cuerpo.
Llegado al punto, ansió el boato.
Humana, que para  nutrirse, necesita tu materia…
Escribir otro versículo.
Completar mi credo...
Aumentar...
¡¡Tu fe!!


2 comentarios:

  1. Con fuerza, usando ese ritmo de frases y con le deseo destilado como un depredador en cada esquina de este poema... Tiene carácter, energia y estilo propio.. Me gusta.

    Saludos desde mi isla.

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  2. Cada persona tenemos un ritmo, sentimiento, alma.
    Me alegra que te guste.
    Besos desde mi Esquina.

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